En Mamá Beauté, entendemos que las madres no siempre tienen el tiempo para lucir al último grito de la moda. ¿Y sabes qué? ¡Es más común de lo que piensas! Pero no pierdas la esperanza –el conocido “Fashionista” de la televisión Latina, presentador de Univisión y asesor en moda de Target, Rodner Figueroa, se une a la sección de Expertos por un minuto para ayudarte a elegir los básicos de ropa y accesorios que toda mamá debe tener.
Definitivamente, las mamás deberían invertir en prendas básicas de colores que no pasan de moda y combinarlos con los accesorios correctos, zapatos o carteras de buena calidad y en tonos neutrales. Un buen traje, un vestido o una blusa con estilo y elegancia son indispensables en cualquier closet y duraran por varios años.
Te sugiero que busques un vestido de corte clásico, en blanco o negro, ya que estos tonos son atemporales. No puede faltar un traje de chaqueta y pantalón básico, trata de que sean de colores sólidos (son más fáciles de combinar y se usan todo el año). Un suéter de diferentes tejidos y texturas como el cuero o tweed o con aplicaciones. Un abrigo chic, de corte clásico, en colores vivos como esmeralda, rubí o zafiro –¡muy elegante y práctico! Y por último, tacones con toques metálicos o con aplicaciones de cristal o de diferentes tonos, dependiendo la ocasión.
Ahora, la manera más práctica de darle vida a un look diario o “uniforme” es agregando distintos accesorios divertidos. Por ejemplo, puedes agregar a su outfit de día una correa delgada con brillos o estampados que den ese toque especial o que te ayuden a resaltar tu figura; bufandas en colores metálicos y, por supuesto, collares, brazaletes, aretes y anillos con piedras brillantes. También puedes cambiar las carteras según la ocasión o tu estado de ánimo en el momento. Combina todos los accesorios con ropa de colores sólidos para balancear tu atuendo.
Dependiendo de tu personalidad, hay diferentes opciones que te harán lucir linda pero a la vez cómoda para realizar todas las tareas que desempeñas durante el día. Los pantalones de mezclilla o denim son una alternativa a los típicos “sweatpants”. Busca que sean cómodos pero que te den estilo. Utiliza los jeans con unos tacones y una camisa blanca y un blazer.
También están muy en vanguardia los famosos “Joggers”: unos pantalones un poco más entallados que los clásicos pantalones de gimnasio y que, además, tienen un corte similar a los pantalones capri o pescadores. Se llevan en distintos tonos, texturas y materiales. Para las mamás que no les guste este estilo o que quieran variar su look, se puede optar por los típicos “leggings” que no pasan de moda. ¡Recuerda combinarlos con tops un poco sueltos y que no sean tan cortos!